Desempaquetando verbos abstractos - Teoría y ejercicios.
Vamos a trabajar eliminando los verbos abstractos. Encontrareis ejercicios al final del post. Una vez lo manejéis con soltura, rebuscad en vuestros trabajos y desempaquetad.
¿Por qué?
Pues porque vamos a generar un tejido narrativo de calidad
con estos cambios.
Lista de verbos a eliminar: pensar, saber, entender,comprender, creer, desear, recordar, imaginar,querer, gustar y
cientos de verbos más que nos encanta utilizar.
Me refiero a todos esos verbos que
no conducen a una escena, a una dramatización, a una acción física, tangible.
Amar y odiar prohibidos, por supuesto.
Me refiero a esos verbos que tienden a
conduciros a frases planas e informativas, de escritor vago y con tendencia al
resfriado:
“En cuanto se despertó,
Tomás pensó que odiaba su vida”.
Convertid esa frase en una escena que le
permita al lector comprender que Tomás odia su vida. No sé… vive solo en un
quinto sin ascensor. Su casa es de alquiler, es vieja y pequeña, se ha vuelto a
romper la cisterna del baño. Tiene que coger dos autobuses para llegar al
polígono industrial donde trabaja apilando sacos de pienso en el turno de noche
de un almacén, vestido con un mono verde y con unos cascos para protegerse del
ruido de los camiones. Termina. Le duele la espalda, no ha amanecido y todavía
tiene que coger dos autobuses para volver a casa.
Aunque es conveniente no ser tan obvio como yo: los matices molan.
Desempaquetad la frase hasta convertirla
en una escena dramatizada. Acción con detalles sensoriales específicos. En
lugar de personajes sabiendo algo, tenéis que presentar una escena dramatizada
para que el lector interprete lo que sabe el personaje.
Se escribe en la página, no en la cabeza
del lector.
Escribir no es informar.
El escritor novel (y el mal escritor)
tienden a utilizar este tipo de frases con verbo abstracto para abrir un
párrafo:
“ Tomás se
preguntaba si Paula estaba enfadada. LLegaba tarde a su cena de aniversario. Seguramente se sentiría defraudada. ¿Y si no se lo perdonaba nunca? ”.
Desvelamos el propósito del párrafo que
viene a continuación, cargándonos la tensión del texto e impidiendo que el
lector interprete.
¿Veis como la primera frase informa de la
intención del párrafo? No lo hagáis.
En todo caso, podríais colocar la frase al final, pero si la escena en cuestión estuviese bien descrita, la frase no sería necesaria:
"El desgastado reloj de latón que su padre le había regalado poco antes de fallecer marcaba las diez en punto. Suspiró con fuerza. Paula había reservado una mesa en el Trafalgar restaurant para celebrar su aniversario, y ya llegaba media hora tarde. Aligeró el paso mientras intentaba localizar algún taxi. Un molesto nudo se había instalado en su estómago; había metido la pata hasta el fondo, y la angustia de que ella no se lo perdonase le quemaba como un hierro al rojo vivo."
Pensar es abstracto. Saber y creer son
intangibles.
Hasta que no controléis la dramatización y el ritmo, hasta
que no distingáis qué partes de la historia mostrar y qué partes contar (en
función del sentido, como siempre) funcionará mejor, será una ficción más
fuerte, más competente, si sólo enseñas las acciones físicas y los detalles
sensoriales que viven tus personajes. Deja que sea el lector el que piense. El
que sepa y crea.
Por supuesto, la lista incluye olvidar y recordar.
Y doler (de ahí el dicho: cuando a una persona le duele la cabeza,
toma aspirinas. Cuando a un escritor le duele la cabeza, toma notas). La lista
también debería incluir ser y tener: En lugar de
contar lo que un personaje “es” o “tiene” (“Paula tiene los ojos verdes”)
intentad detallar lo que el personaje (o cosa) “es” o “tiene” con acciones; con
un gesto, con un diálogo…
Propuesta de Trabajo para comenzar a desempaquetar:
Vamos a intentar desempaquetar y modificar las siguientes "Escenas":
*Antonio recordaba perfectamente su infancia, siempre estaba en el taller de su padre, lleno de grasa. Luego su madre le reñía, pero el pensaba que aquello era más divertido que hacer los deberes.
*Julia estaba muy enfadada con Pedro. Quizás fuese por su tendencia a no acudir aseado al trabajo. Tal vez aquel olor que despedía cuando atendía a algún cliente. Deseaba hablar con él, pero no sabía cómo.
Colgad vuestras escenas, desempaquetando y usando los mínimos verbos abstractos posibles en el foro. Encontrareis un hilo llamado: Ejercicio sobre desempaquetado de verbos abstractos.
Podéis comentar los ejercicios de los demás. Comentaremos los vuestros.
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